Me gustas asi

Me gustas en prosa y verso, me gustas así,
Con todas las letras de un Te amo,
Con toda la gramática y la semántica
Que encierra el suspiro de tus labios.

Me gusta que escribamos este libro juntos,
Página a página, capítulo a capítulo,
Letra a letra, significantes y significados,
Un libro tan sólo nuestro, uno que leamos,
Uno de los dos solos aunque nadie lo comprenda,
Un libro que no tenga fin, sólo inicio,
Sin prólogos, no aclaraciones, ni epitafios,
El libro que se inicia con cada uno de tus besos.

Echo de menos la paz que me das en los brazos,
La felicidad que sumas a mi felicidad de vivir,
Sentirme arropado al calor de tu cuerpo
Y desnudo al frío de tus ausencias estos días.

Echo de menos tu mirada azul como el cielo,
Tus labios que son mi alimento, mi refrigerio,
Tu piel, cada rincón, cada lunar, cada pliegue de ella,
Tus andares, tus bailes, tu mano sobre mi mano,
Tu pelo cuando se apoya sobre mi pecho,
Tu mirada y tu sonrisa cuando me miras embobada,
Y que yo pienso que es amor que se te escapa sin querer.

Me gustas y no podría decir nada que me guste más que otra,
Me gustas y ni yo mismo sé porqué me gustas, inexplicable,
Sólo sé que quiero estar a tu lado el resto de mi vida como planeé,
Sólo sé que contigo soy feliz si nos miramos, si nos besamos.

Me gustas así tal cual eres,
Con tus defectos y virtudes,
Tus sueños, tus anhelos,
Tu forma de ser tan niña
Y a la vez tan mujer,
Me gustas porque me llenas,
Me completas al cien por cien,
Porque encofras nuestros pilares,
atesoras mis sonrisas,
Y encoges el corazón
Si te digo "vida mía".

Silencios

Que difícil se me hace no escuchar tu voz,
el leve susurro del viento entre tus labios,
el efímero sonido de las olas desde tu garganta,
el ulular del viento lleno de significados.

Que difícil no leer tus palabras escritas,
cada significante y significado de todo pretérito,
el leve martilleo de tus dedos sobre el teclado,
el tintineo del goteo de las palabras sobre blanco.

Que difícil disimular ante el grito de tu mirada,
llena de tanto contenido, aunque tan breve,
llena de escaseces, de tiempos muertos, de vientos,
llena de  besos, y te quieros, y de quiero verte.

Que difícil la distancia que no acortamos,
salvo raros ratos en los que podemos mirarnos ,
llenos de te extraño, de abrazarme fuerte,
llenos de no me suertes, llenos de vuelos sin alas.

Reajustes

Vuelvo a no tenerte tras unos días de tenerte siempre,
vuelvo a echarte de menos, otra vez, a pensarte,
vuelvo a quererte como nunca he querido a nadie,
vuelvo a desearte, a querer hablarte, a abrazarte.

Se acabo el fin de semana tan largo,
ya marchaste y ya te extraño,
ya vuelvo a desear verte de nuevo,
ya quiero tenerte entre mis brazos.

Vuelvo a reajustar mis prioridades,
he visto como ahora si quieres avanzar,
aunque aun no sabemos ni cómo ni a dónde,
aunque sólo vayamos al día a día, a lo inmediato.

Ahora tú eres quien me habla y me busca,
quien quiere algo más allá del sólo vernos,
la que quiere un aquí y un ahora, un te quiero,
la que aunque no lo diga suda amor por la piel.

Y eso me está llenando, me esta acelerando,
esta haciéndome feliz como nunca fui,
porque aunque no lo buscaba ahora,
es lo que siempre había deseado a tu lado.

Ahora ya no importan los medios, ni el tiempo,
intentamos disfrutar cada segundo de los relojes,
y cada aliento de nuestras bocas, cada gota
del licor que desprenden nuestros labios.

Y me tengo que reajustar para no pensar en pasado,
para que no me asalten de nuevo mis dudas,
liberar mi cabeza de quien fuiste y de tu trato,
volver a atesorar los momentos que me estas dando.

Ahora quiero robarle días al tiempo y al sol,
volver a dejar salir mi estrella, esa estrella,
volver a brillar en tu cielo azul, a pesar de todo,
a pesar de las luces que oscurecen nuestros ojos.

Porque ahora diré sin tapujos que te quiero,
igual que tu me lo dices a mi, sin verte agobiada,
sin provocar una reacción instintiva de huida,
sin provocar giros verbales para evitarlas.

Y espero que no te equivoques y como dices
ahora si vayan las cosas adelante como tu vaticinas,
que ahora si seamos el uno para el otro, con futuro,
que ahora sí por fin podamos ser felices.

Por eso mis reajustes, el mantenerme en mi linea,
el mantenerme en mis cambios, en mi seguridad,
el quererte queriéndome más a mi que a nada,
el compartir contigo sin dejar de compartirme con todos.

Despertar y saber que todo (nada) ha cambiado

Me despierto en el colchón y me doy cuenta,
De que todo, de que nada, de que lo esencial,
Ha cambiado en toda su profundidad y su pretérito,
Que tú ya no eres tú, ni yo soy quien había sido.

Tú desgarraste el final de nuestros finales a sonrisas
Invadiendo de miradas todo mi cielo, mi estrella,
Acaparando mi tiempo, mi pensamiento, mis manos,
Mis versos, mis sonrisas, mis abrazos, mis besos.

Todo ha cambiado ahora, o nada, ya no lo sé,
Porque te sigo mirando y veo los mismos gestos,
Veo las miradas, veo las sonrisas, y ahí sigues,
Como hace meses, sin cambios aparentes y con miedo.

Yo que te quiero como siempre quise querer,
Y sueño con tu abrazo cada vez que nos vemos,
Que añoro las ondas que agitan nuestro mar,
Ese que jamás estuvo en calma, que lo fue todo y nada.

Despertar ésta mañana y saber que todo ha cambiado,
Y que a la vez nada ha cambiado de lo que sentíamos,
A pesar de los vaivenes que nos está dando la vida,
A pesar de que el pasado nos persigue por estas callejuelas.

Olvidarte no fue fácil, hubo lágrimas, insomnio, pataletas,
Salpiqué de tinta cuadernos que nunca leerás,
Arranqué contra ti en lugares que nunca visitarás,
Escalé tus muros para acabar empotrado contra el suelo.

Pero al despertarme hoy sé que todo ha cambiado,
O nada, porque de alguna manera estas a mi lado,
Que no sé ni cómo, ni porqué sigues ahí en mi vida,
Dándome un premio que jamás me he merecido.

De que es más lo que nos une que lo que nos separa,
De que Don Mario Benedetti te describe y nos describe,
De que de todas las mujeres que conozco tú eres única,
De que tus cambios y mis cambios nos hacen ahora uno.

Te quiero y es por eso que hago todo lo que hago,
Al despertar me he dado cuenta de que te quiero a mi lado,
De que quiero tu felicidad por encima de cualquier cosa,
De que todo o nada ha cambiado entre nosotros.

Tu amistad

Me importas demasiado
para no quererte en mi vida,
porque cambiaste mi mundo,
lo tocaste cuando más lo necesitaba,
trasformaste con tu varita
mis lágrimas en sonrisas,
mis miedos en esperanzas,
mis frías noches en cálidos abrazos.

No me imagino la vida sin ti a mi lado,
sin tus bailes y sin tus abrazos,
sin tus risas, sin tus miradas,
sin esa lógica tan tuya que a veces destroza,
sin la complicidad, los guiños, las miradas,
sin esas conversaciones, esas horas vivas,
las sonrisas esas que me dicen:
"aquí estoy, no te soltaré jamás".

Pero es tu mirada lo que siempre me atrapo,
limpia, sincera, que besa y a la vez castiga,
que abraza sin tocar, y me baila en la distancia,
esa a la que escribí poemas que llegan,
esa que si no fuera por la amistad
desearía besar de todas las formas posibles,
esa que me descoloca en mi sofá,
esa que me deja sin aliento si me mira.

Por eso me importa tanto tu amistad,
porque eres limpia y sincera, directa,
un pilar en el que apoyarse y a la vez
que necesita que a veces lo sujeten,
por eso yo también estoy ahí, para que te apoyes,
para que no camines sola pase lo que pase,
para que sepas que puedes contar conmigo,
como dijo Mario Benedetti.

Eres mi sueño hecho realidad

Eres lo que mas quiero hoy,
eres mi sueño hecho realidad,
mi tranquilidad en estos momentos
en los que la tormenta todo lo arrasa.

Eres el fin de todos mis principio,
mi primer y último pensamiento,
la espita del gas que todo lo quema,
la madeja que teje mis sueños.

Eres y has de ser quien me cobije,
porque en tus brazos encajo perfectamente,
somos perfectos el uno para el otro,
por la complicidad, por como nos miramos.

Mi ángel y mi cielo estrellado,
yo tu estrella polar y tu guía,
tú mi calma, mi reposo, mi aliento,
yo tu ola, tu mar, tu silencio.

Mis brazos han de ser tu cama
y mi tripa tu mullida almohada,
mis suspiros serán tus sabanas
y mis besos entrelazados la nana.

Tu has trastocado mi mundo,
has cambiado todos mis sentimientos,
y los has desordenado de nuevo,
para reconstruir mis cimientos derruidos.

Arrollando a besos demoledores,
machacándome con tus orgasmos,
arrebatándome la cordura aferrada a mi cuello,
arañando mi piel y mi alma a la vez.

Es por eso, que te quiero a mi lado,
y ya no te podré soltar de la mano,
caminaremos al lado, juntos,
este camino desconocido, pero nuestro.

Lo que me das

Llevo tantos días pensando en ti,
sacándote a colación neurona a neurona,
mirando las fotos que tengo tuyas, pocas,
menos aún en las que estemos juntos.

Porque en tan poco tiempo me has dado tanto,
invadiendo mis espacios mas ocultos y mis miedos,
asaltando a amor armado mis cajas de seguridad,
desmontándome como se desmonta un mueble.

Y ha sido ese amor que irradias, esa mirada mimosa,
esos abrazos de oso, ese cielo de tu sonrisa de mariposa,
ese estar enamorada por cada esquina de tu casa,
ese clavarme los clavos al corazón a base de besos.

Ese hacerme una caricia en la espalda mientras duermo,
ese subirte sobre mi para besarme, ondearme,
mirarme desde la altura, excitarme a cada gota de sudor,
arrancarme de mi mismo para ser nosotros otra vez.

Cuánto soñé esto en mis noches mas oscuras de invierno,
cuánto lo desee y no llegaba, tu guardabas silencio,
pero volviste y fuiste mi tsunami particular, me empapaste,
me limpiaste el alma de nuevo para empezar de cero.

Y ahora, en Agosto, desde mi cama te pienso otra vez,
has vuelto a mi vida de la manera más insospechada,
para definitivamente quedarte a mi lado como siempre quise,
como llevo meses deseando que te quedes, a mi vera,
al calor de mis abrazos y al frío de mis besos de hielo,
al iceberg de mis palabras y a la llama de mis miradas,
al fin has vuelto, de una manera rara, y no te dejaré volar,
no otra vez, te quiero cerca, aunque sea en la distancia.

Miradas

Es increíble lo que me sigue haciendo tu mirada,
Tan único, tan ineludible, tan mágico como la primera,
Tan irracional, tan deseoso, tan inexplicable, tan mágico,
Tan por sorpresa, tan único, tan irrepetible, tan tierno.

La primera vez que te vi, ya esa mirada me llegó,
Me prendó al instante, nunca más me quería  separar
Y aún así me separé de ella, por darle su espacio,
Por dejarla libre de nuevo y saber si volvería.

Y es que es tan única tu mirada, tan inimitable,
que llena cada cavidad de mi piel y mi alma en la distancia,
Que acelera cada célula del corazón impregnada de ti,
Que desaloja mis tristezas y miedos, que derriba muros.

Es esa mirada y no otra la que quiero para siempre,
La que me provoca mil taquicardias consecutivas,
La que desempolva versos, sonrisas y besos no dados,
La mirada cristalina, chispeante, el espejo donde me miro.

Eres mi cielo, mi sol y mis estrellas, y esos ojos mi guía,
Esa mirada es el terremoto que me sacude al despertar,
El huracán que nos arrasa cuando bailamos pegados,
Esa mirada que a veces me acojona de lo profundo que sonríe.

Intenté escapar de ella varias veces en estos meses,
Pero siempre está perenne en mi cabeza, en mi piel,
Y a tu mirada le siguieron conversaciones, risas,
Orgasmos múltiples, abrazos, silencios cómodos.

Hoy y ahora echo de menos esa mirada tan increíble,
Esa que me ha provocado que este enamorado de ti,
Hasta los huesos, hasta el alma, que ha arrasado conmigo,
Atropellándome de nuevo como nadie hizo nunca.

Esa mirada será mi mundo, no quiero nada más,
Serás mi cielo, mi bendita luz en el camino,
Yo prometo ser la estrella que te guíe sin miedo,
 Déjate llevar, mi cielo, mi vida, tu mirada es mi mundo.

Huracan

Te me has clavado tan hondo,
Has entrado como un torrente, un huracán,
Has asaltado cada poro de mi piel,
Cada hueco, cada herida, cada segundo.

Me has desarmado y rendido,
Me has matado con cada suspiro,
Agotado mis resistencias a quererte,
Reavivado mis ganas de tenerte.

Me has abrazo tan fuerte que me has roto,
Me has llenado los segundos de ternura,
Vaciado el alma de miedos, de agobios,
Cerrado los ojos al bailar y sentirte.

Has vuelto a llenar mis sabanas frías
Con cada te quiero y cada te amo de tu boca,
Con cada orgasmo al unísono que nunca tuvimos,
Con cada sonrisa cosida a caricias

Y ahora echo en falta tu piel,
Sin ella está noche de verano es fría.

YO

YO
nunca
nunca creí,
nunca lo pensé,
nunca lo esperaba,
nunca lo pensé de ti,
nunca algo fue tan breve,
nunca un amor duró tan poco,
nunca vi sustituirme tan deprisa,
nunca vi a nadie lanzarse a la piscina
y en el aire volverse al bordillo por miedo,
pero gracias a dios hay alguien que me quiere,
alguien que me querrá por siempre a pesar de todo
....
YO
por que
valgo mas
que las migajas
esas que me das
cuando nos vemos,
más que los besos falsos,
más que tu terrorismo emocional,
más que los silencios en tu almohada,
más que tantos giros y ordenes, y cambios,
pero gracias a la vida aprendí que hay alguien
que me quiere mucho más que todo el resto del mundo
....
YO

pero alguien más me quiere
y dejo que entre a compartirme


Gracias por la libertad, por la escalera con la que he escalado mis muros, gracias por volver y por estar ahí esperándome, ¡Gracias! y gracias por echarme de tu lado...también a ti ¡Gracias!

...Y sin embargo...

Aún sabiendo que estas con otro,
aún sabiendo que ya no soy opción,
aún no queriendo ya ser tu "todo",
sigo queriéndote como aquella noche.

Aún sabiendo que no querrás ni amistad,
aún sabiendo que no lo hiciste a mal,
aún sabiendo que puede que ni me hables,
te sigo deseando lo mejor en la vida.

...Y sin embargo... te quiero,
y sin embargo el odiarte no cabe en mi mente,
porque en el fondo sé que ahí, escondido,
ha quedado en tu corazón un trozo de mi.

...Y sin embargo cuando duermo sin ti,
contigo sueño, que dijo Sabina,
porque te has clavado tan hondo
que a mi pecho le cuesta arrancar por la mañana.

No esta siendo fácil arrancarte de mi adentro,
porque sigo pensando en tu mirada,
en lo bien que me siento cuando me miras,
en lo a gusto que estoy junto a tu piel.

Aunque tengas a otro ya, sigo pensándote,
a contracorriente, como siempre,
haciendo descarrilar otra vez mi fuerza,
desmoronando mis ideas, mis métodos.

Tú sola te has cargado todo mi mundo
en apenas un par de meses me has volteado,
me has dejado sin fuerzas para seguirte,
sin deseos de seguirte más bien.

Pero sé que habrá alguien que te merezca,
yo sólo podre seguirte como amiga,
pero sé que no va a ser posible tampoco,
tu eres de las de todo o nada.

Y sin embargo te extraño cada noche,

extraño nuestras conversaciones,
nuestra manera de bailarnos, de rozarnos,
de mirarnos a la cara, de besarnos,
de querernos a nuestro modo extraño,
de acapararnos algunas noches locas,
de sentirnos en la distancia, acotarnos,
extraño tus sabanas, el olor de tu piel,
el final de cada orgasmo tuyo,
tus dedos clavados en mi piel.

Extraño sobre todo tu mirada,
y sin embargo...a veces mata.

Algo ha cambiado en nosotros

Algo ha cambiado en nosotros dos,
con el tiempo, con los meses,
algo que no sabemos explicar
pero que sentimos al bailarnos.

Algo a vuelto a nacer, a pesar de todo,
a pesar de los agobios, a pesar del silencio,
tú lo llamas destino, yo lo llamo querernos,
nos ha llevado a fundirnos de nuevo.

Algo ha cambiado en nosotros,
tu eres más libre, más espontanea,
yo más seguro, más desapegado,
ambos nos hemos besado en la mirada.

Algo ha cambiado entre tú y yo,
que nos ha llevado a enzarzarnos
otra vez entre unas sabanas
como nunca antes habíamos hecho.

Tú me dices que estas enamorada,
yo te había pedido tiempo para desenredarme,
y aun así no he dejado de quererte,
por eso no todo ha cambiado.

Pero si cambió tu manera de mirar,
tu manera de besar, tu manera de moverte,
tus ojos al mirarme, tu sonrisa,
tu forma de hablarme y besarme,
tus caricias han cambiado,
tu forma de encontrarme en lo oscuro,
tu manera de seguirme en silencio,
tus palabras, tus gestos,
has dejado la vergüenza en el trastero,
desenredando la madeja de tus sentimientos,
abandonado ese no querer estar
por ese hagámoslo ya, mi estrella.

Y es por eso que llevas tiempo ganándome,
ganándote de nuevo lo perdido,
pero aún queda mucho, escollos,
esos salientes que no me dejan avanzarte,
esas espinas clavadas en los últimos estertores,
esas de una relación sin futuro, sin sueños,
esas que me decían: vete, huye, sé feliz.

Pero hoy soy feliz pensándote, hablándote,
recibiendo cada mañana un buenos días,
cada noche un felices sueños,
porque algo ha cambiado en nosotros,
algo en lo más profundo ha cambiado
y vuelvo a sentirme seguro de mi,
a quererte como hacia unos meses que no quería,
a sentirte más cerca de lo que nunca estuvimos,
a añorarte, extrañarte, desearte,
desnudarte con mis pensamientos,
abrazarte con mi mirada y mi sonrisa,
y tu lo recibes como un regalo,
no te agobian esta vez las atenciones.

Hoy soñaré en que estos cambios sean permanentes,
será el único modo de seguir avanzando,
porque no pienso volver al pasado
ni para coger impulso, ni para reprocharte,
has venido y en 3 días me has arrasado
otra vez con esos ojos azules profundos,
me has hecho sudar felicidad por la piel,
nos hemos estado preparando para estar,
para modificar lo que no estaba bien.

Ahora me tengo que poner a la par tuya,
avanzar juntos, paso a paso el camino,
dejar la encrucijada donde nos unió la vida,
y continuar, a donde sea, sin un destino,
tenemos una referencia, la estrella polar,
y una meta, llevarnos al cielo estrellado.

Limites

Ha llegado la hora de poner los limites,
de pararte los pies y dejar de jugar,
de detener tu intento de dominar la situación,
de saltar de este tren en marcha antes de descarrilar.

Ha llegado esa hora, ese limite, ese momento,
que estés con otro es ese limite y no seguiré el juego,
eso destroza cualquier esperanza de tenerte,
eso me libera a perseguir mis anhelos, mi felicidad.

Ha llegado el momento, el final de la sequía,
el quererte sin quererte, el añorarse sin tenernos,
el quebrar las promesas hechas antaño,
entre sueños embriagados de tus besos.

He de poner los limites de lo que creo injusto,
limites marcados hace tiempo en tu cabeza,
esos limites que dijimos nunca ponernos,
esos que tanto me duelen porque te quiero.

He de zanjar, trazar las lineas que nos mantengan
en ese estado de suspensión hipnótica,
esa hibernación, ese status quo de recuerdos felices,
ese vivir sin vivirte, estar sin estar, mirarte sin mirarnos.

Acaparar las hojas que caerán en unos meses
para hacerme mi cama de invierno, mi refugio,
concertar con el tiempo una tregua sin limites,
despedirme de tus besos de fresa, el sabor de ti.

Sólo limitándote, parándote, imponiéndome
puedo zanjar la situación y dejarte la libertad,
esa que que necesitas para ser feliz y enamorarte,
esa que no nos supimos dar cuando estábamos a tiempo.

Algún día espero que rompas tus barreras y limites,
que sepas valorar lo que has perdido en el orgullo,
que abras las puertas, derribes los muros que te aprisionan,
que descartes toda mala intención en quien te ama.

Ahora, hoy, relájate, junto al mar, lo mereces,
necesitas esa calma, no pienses más en ello,
tu felicidad no depende de nadie, recuerda,
sólo de ti, de tus sentimientos y de tus decisiones.

Sorpresas

Nunca podré entender al amor, lo sé,
nunca podré saber a ciencia cierta
lo que dispara ese percutor del disparo de salida,
esa gota que colma los vasos de tu deseo.

Nunca podré entenderlo, pero ahí está, machacando,
haciéndome latir el corazón a cada beso, vivo,
quitándome el sueño por soñarte en mi cama,
amándome como dices que me amas.

No le entenderé nunca, pero ahí estas, firme,
como las rocas de los acantilados, fuertes,
en silencio, poco a poco, con el tiempo,
esperando a que algo pase y reaccionemos.

No entenderé al amor porque es ininteligible, incomprensible,
que es como debe ser el amor, inexplicable,
un torrente que nos arrastra a los dos unos minutos,
una bachata, lo que dura una caricia en tu suave espalda.

Nunca podré conocer el mecanismo, el secreto,
sólo sé que he de arriesgarlo todo a una carta,
a la suerte si no me esquiva tras la esquina de tu casa,
a un beso un viernes en lo mas oscuro, por sorpresa.

Jugármela otra vez, quizás la última vez, y perder,
y volver a levantarme para seguir de nuevo, feliz,
sin mirar atrás con el rencor de tus recuerdos
bailarte otra vez en mis pensamientos nocturnos.

Y sólo, al final del todo quedará de nosotros polvo,
el polvo, es lo que hace el paso del tiempo con todos,
en su lugar,guardando sólo en la retina los buenos momentos,
los besos, los abrazos,las miradas, los guiños, tus sueños.

Y ahora quisiera tenerte en mis brazos de nuevo,como ayer,
como cada momento que nos hemos visto,reencuentros,
volver a besarte, a acariciarte, a hacerte el amor,
increíble, estar de nuevo seguro de mis sentimientos.

Falsificar las firmas para tener un visado a tu cuerpo,
ignorar todos los males que hemos pasado, los silencios,
quererte como nos merecemos, sin miedos, acabar todo
con un abrazo, una mirada y un beso.

Borradores

Me duele la cabeza de pensarte,
de amargarte los sueños y las esperanzas,
de quererte y no encontrarte en la encrucijada,
de pararme unos segundos a esperarte,
de sacar de mi chistera mil conejos,
de hacer de ilusionista y que no aplaudas,
de perder la esperanza ya me duele,
conseguiste lo que la Mar no quebró,
lo que el viento del norte no derribó.

Me duele tanto saber con tu silencio,
intuir que te marchas sin yo verlo,
que las yemas de mis dedos ya no te tocan,
que ya no hay caricias en la espalda,
ni besos en tus labios, ni miradas furtivas,
ni lenguas que nos burlen las mañanas,
ni siquiera resquemores por el incendio,
conseguiste abrirme nueva herida,
otra cicatriz en mi maltrecho pecho.

Me duele el corazón de tanto roto y descosido,
de tanta aguja sin punta clavada a fuerza,
de tanta puntada sin hilo, y remiendos,
de tanto parche nuevo en telas viejas,
de tanto quererte y no tenerte en mis brazos,
de tanto despertar con tu sonrisa en mi mente,
de tanto mirar a las miradas y no encontrarte,
de tanto ubicar tus besos en los lugares,
conseguiste general nuevos recuerdos
en donde antes sólo había tristezas y desastres.

Me duele al fin y al cabo el no tenerte,
el no quererte como tu quisieras que te quiera,
el no sacar de mis bolsillos mil razones para odiarte,
el no saber como encarar el que me huyas por la acera,
el no intentarlo desde cero, como locos,
como enamorados adolescentes impetuosos,
como ciegos, como pollos sin cabeza,
como intrepidos bohemios en París,
me duele, si tu supieras, que estés ya con otro.

Infinito

Infinita será la magia que nos unió,
las miradas, las caricias, los besos,
infinito el tiempo que pasamos a solas,
los bailes, los abrazos, los gemidos.

Infinitos los momentos, las canciones,
tus ojos al mirarme de soslayo,
Infinitos mis sentimientos,
mis vivencias, mis anhelos.

Pero por lo visto todo acabó de golpe,
así que nada puedo hacer, ni luchar,
lo entiendo, entiendo la libertad,
entiendo que nunca fuimos uno.

Y aunque queden en mi retina los momentos,
aunque quede la infinitud de tu mirada,
aunque quede el resquemor de no intentarlo,
aunque siga pensando en el turismo emocional,
sé que eres feliz así, y eso me hace feliz.

Seguiremos viéndonos, hablando,
abrazándonos para no sentir frío,
bailando para mejorarnos,
paseando y riendo en los caminos.

No sé si será lo mejor, ni donde nos llevan
esos caminos que tenemos por trazar,
el tiempo todo lo pone en su lugar,
pero lo importante es ser felices
a nuestro modo, a nuestra manera.

Pero todo lo nuestro será infinito,
la magia, los besos, los abrazos,
para mi será infinito porque nunca,
nunca me sentí así con nadie,
nunca recibí tanto cariño en tan poco,
nunca podre olvidar lo que para ti no es importante,
nunca podre eliminar cada poro de tu piel,
ni cada gemido, ni cada sonrisa,
nunca podre dejar de mirarte al Alba,
ni dejar de soñar en tu mirada.

Escápate conmigo

Escápate conmigo allá donde no nos vean,
allá donde estemos solos ante al mundo,
escápate conmigo, al balcón de mi cama,
a la playa de mis sábanas, a la sombra de mis besos.

Escápate conmigo a lo más profundo de la sala,
allá donde los ruidos son silencios,
escápate conmigo, a ese baile, a esa bachata,
a las ondas de mis manos, a vaivén de mis caderas.

Escápate conmigo a la catarata de mis brazos,
allá donde sople en viento que todo lo arrastra,
escápate conmigo, a esa luz, a esos molinos,
a ese banco en medio de la nada, cerca del cielo.

Escápate conmigo a pasear por las arenas,
allá donde pase el tiempo rápidamente, raudo,
escápate conmigo, matemos a besos las horas,
resucitemos a abrazos los cielos, ahoguemos los miedos.

Escápate conmigo a romper a abrazos las cadenas,
allá donde la libertad nos deja amarnos,
escápate conmigo, y no me sueltes más la mano,
caminemos al lado del otro, andemos los caminos.

Escápate conmigo y si al final nos separamos,
al menos quede la amistad, el saber que lo intentamos,
escápate conmigo, no me sueltes de la mano,
guíame con tus ojos, porque a ciegas yo me caigo.

Felicidad

Oír vuestras risas en mi hogar,
aun resuena vuestro eco,
vuestras carcajadas...
aun resuena vuestros silencios,
las canciones, los pulmones,
las historias de Begoñas
y las de la señora Valiente.

Aun están aquí las palmas,
los aplausos, el rasgar de la guitarra,
las miradas cómplices,
los besos, los abrazos,
esa sensación fresca
de sentirse tan arropado.

Aun me quedan las imágenes,
esa felicidad plasmada en tu rostro,
el que no sobre nada,
el sentir que no me falta nadie,
el café de media tarde,
un paseo por el huerto,
el desear que todo sea perfecto.

La deshora que me marca el corazón
en esos abrazos furtivos,
en esos besos medio a escondidas,
en las miradas de reojo,
en las sonrisas de esos labios,
en los juegos de manos,
en el sin fin de los deseos.

Si he de definir la felicidad,
que sea a vuestro lado,
por que el veros felices
es el premio que recibe
el que ama, el que siente,
el que no espera nada a cambio.

Saltar al vacío sabiendo que sois mi red,
bailaros sin ni siquiera escuchar la música,
abrazaros con el pensamiento sin más,
besaros con una mirada a 3 metros,
saber que nos deseamos mutuamente,
acaricias el pelo sin siquiera tocarlo,
disfrutar su mirada en la distancia,
saber que su piel con mi piel
sólo se juntan en soledad,
no esperar un largo abrazo
ni unos besos con los que no contabas.

Y ahora la casa ya vacía
sigue guardando las risas,
los besos, las gracias,
los abrazos (alguno agradablemente largos),
las canciones, los silencio
que nunca fueron incómodos.

Si he de definir felicidad,
esta sería mi definición:
amigos, sin presiones,
disfrutando lo que uno hace,
disfrutando de quien uno quiere,
incluso en la distancia,
disfrutando de ti sin tocarte,
sabiendo que algo hay
en el aire que lo impregna todo.

Mi estrella polar

Estas brillando allá en lo alto,
lejos, inalcanzable, intocable,
más lejos de lo que yo pensaba,
pero brillando con tanta fuerza,
independiente, blanca, guiando,
siempre en la dirección correcta.

No quiero esconderte, mi estrella,
mi sol, ni lucero del alba,
quiero que todo el mundo vea
el resplandor de tu sonrisa,
los luceros que son tus ojos,
esos faros, esa risa de la mirada.

Y tienes una luz propia, como cada estrella,
una luz que mereces que la gente conozca,
una luz que llena tanto como esperaba que hicieras,
una vía láctea de sensaciones, de besos,
una entre millones de estrellas, la más brillante,
la estrella Polar de mi mundo y el tuyo.

A veces te oscureces, estrella,
desapareces entre las nubes,
pero sé que detrás sigues tú, distante,
pero sigues brillando aunque no te vea,
aunque no oiga el murmullo de tu luz,
aunque no pueda leer el mapa de tu falda,
no pueda intuir la respiración de tu inmensidad,
aunque avecines una gran tormenta.

Pero me gustas tal cual eres,
con tu brillo y tu oscuridad,
con lo bueno y lo malo,
con esa independencia que te brilla,
con esas ganas de lucharnos a besos,
con esos arrebatos que descolocan,
con las sonrisas y las muecas,
con todo eso te amo, mi lucero.

Súbeme más noches al cielo
y yo te bajo cada vez una estrella,
me gusta mi estrella polar,
aunque a veces no te sienta.

Historias para entenderte: mirando al cielo

     Miro a menudo al cielo, bastante a menudo y me pregunto si no es como tú, si tú no eres Mi Cielo particular, ese cielo que sobrevuela nuestras cabeza y pasa día y noche sobre nosotros animando o cambiando nuestro estado anímico.

      A veces, de día, el cielo es raso, azul, radiante, un cielo despejado que deja ver en toda su plenitud la luz del sol, que ilumina cada rincón de todo aquello que miramos y sentimos. Otras veces, también de día, el cielo se cubre de pequeñas nubes blancas, que a veces tapan el sol, pero no impiden ver la luz, nubes que pasan lentamente ante nuestros ojos, sin mas pena ni gloria. Otra el cielo se encapota, y oscurece el día cubriendo con un manto gris todo, amenazante, pidiendo a gritos descargar sus lagrimas. Y por ultimo, en otras ocasiones se torna al negro, relampagueando, tronando, descargando su furia sobre nosotros. Y a pesar de todos esos distintos estados, el cielo me gusta, con lo bueno y con lo malo de cada uno de esos momentos. Depende de la época del año en la que estemos, hay épocas mejores y peores, por supuesto. En el fondo sabemos que aunque haya distintos estados del cielo, este, en el fondo, y aunque no lo veamos, es azul y radiante tras las nubes. Así te veo a ti, así veo tu fondo, azul, como mi color preferido, te veo así a pesar de que a veces pasen nubes, a pesar de que descargues tormentas y encapotes los besos con el gris amenazante de la lluvia.

     Por la noche el cielo es negro, pero plagado de millones de estrellas. Así también te veo. Unas brillan más otras menos (me imagino que eres la más brillante de todas), pero todas brillan con su propia luz, no necesitan de nada ni de nadie para despedir ese brillo y ese calor que atesoran, igual que nadie debe depender y necesitar a nadie para brillar con su propia luz. Las estrellas además nos pueden servir de guía si las sabemos leer e interpretar, en la antigüedad era el medio más fiable para no perderse en una navegación o en un largo camino por los campos en la oscuridad. A veces en la noche las estrellas se oscurecen, por las nubes, por que estamos cerca de una luz que nos cierra las pupilas y nos impide ver las estrellas menos brillantes, por una luna llena enorme, pero a pesar de ello allí siguen, esperándonos, esperando brillar para nosotros, y eso es bueno, aunque no las veamos, ahí están esperándonos, ahí permanecen con su brillo. Te veo también como esas estrellas con tu luz propia, con tu total independencia de mi y de quien te observa, por ti sola irradias mas luz que todas las bombillas de la ciudad, con tu sonrisas y con tus ojos.

     Por que en el fondo eres mi sol y mis estrellas, la luz de mi noche, el azul de mis días, y aunque a veces las cosas se oscurezcan y llueva, sé que detrás hay un cielo azul, un sol radiante y unas estrellas brillantes, independientes, que brillarían igual sin mi, pero que hoy por hoy siento ese calor, esa luz y ese brillo en este corazón.

     Así somos todos para los demás, estrellas, soles y cielos.