Pararía este tren tan desbocado,
sería la calma de tus tempestades,
desgarraría el tiempo por que parasen,
entraría en tus vientos huracanados.
Bajaría sin corazas a tus infiernos,
apagaría los fuegos con mis besos,
daría mi tranquilidad y sosiego,
me quedaría hasta para tus miedos.
Asaltaría los muros con las desnudas manos,
los desmoronaría sin piedad, piedra a piedra,
pasaría por tus laberintos oscuros a tientas,
sería un puzzle en blanco y negro sin ti acabado.
Esperaría,cuando no duermes, el amanecer a tu lado,
velando, cuando duermes, el sueño de madrugada,
desgarrando todas esas tus nubes inesperadas,
disiparía la neblina de tus cristalinos ojos.
Sería tus labios de puro rojo,
tus ojos a centímetros mirando,
tu piel, tus poros, tu pelo castaño,
mis manos sobre tus manos de oro.
Por ti, cerraría por siempre este libro polvoriento
donde guardo como tesoro tus silencios,
Y en una botella lo arrojaría al mar con tus versos,
al océano Pacífico de mi calma, mar bravío en tu sueño.
No hay comentarios:
Publicar un comentario