martes, 29 de septiembre de 2009

Poeta muere ( 7 años despues)

Poeta muere hoy ahogado en sus palabras, 
poeta muere triste porque sus versos ya no hablan. 
El último poeta se desgarra a jirones 
los versos de la espalda con uñas de cuchillas. 

El joven poeta envejece y pierde la fe en las palabras, 
¡ Es tan inútil decir en verso lo que siente el alma! 
Locura es la que lo mata, Ilusiones las que le velan, 
Soledad la que le entierra, Tristeza la que le esperaba. 

Poeta muere hoy como un hombre 
sentado en su cátedra de pedernal, 
perdonando los amores fracasados, 
desgarrando hojas garabateadas

Poeta se rinde esta mañana 
y deja caer los brazos inertes, 
su pluma remonta el vuelo y su alma la sigue al cielo, 
el poeta al fin desaparece. 

 EPITAFIO: Hoy muere un poeta... mañana nacerá una estrella.

Los sentidos (9 años despues)

Sentir que mi momento pasó, 
estar aquí sin estar, 
pensar que ayer estaba solo, 
leer sin comprender, 
respirar sin aire, 
y beber la arena del desierto. 

Sentirme triste ayer, 
estar alegre dentro de mi Ego
pensar que el tiempo se pierde, 
leer cartas de Amor, 
respirar el viento del Norte, 
y beber líquidos negros. 

Momentos irreales ahogan mi vida gastada, 
el tiempo ahoga mi inspiración 
que en otros tiempos tenía. 
Horas de ausencias, 
noches en vela, despierto, 
meses sumido en la desgracia, 
años perdidos entre velas e inciensos, 
instantes que se van, 
recuerdos de un pasado alegre, 
olvido del abandono. 

Sentir que mi tiempo llega, 
estar sentado libre, 
pensar en tu ficticia muerte, 
leer poesías viejas, 
respirar para soltar una carcajada, 
y beber del nuevo amor incierto.

¿Qué ha pasado? (10 años despues)

Pasó el viento
y nos golpeo la cara,
pasó el tiempo
y fuimos amigos.

¿Qué ha pasado?
Sólo un hada.

Te tenia y hablábamos,
nos divertíamos en la cama,
a veces llorábamos,
otras reíamos.

¿Qué ha pasado?
La nada.

Me olvidaste y me marche,
me dejaste de hablar
y lloré, solo,
por estas dos almas.

¿Qué ha pasado?
El agua clara.

Me voy y no hablamos,
pregunto: "¿Qué pasa?
"Nada", contestas.
"¿Cansada?- "Tal vez"
"¿Te ayudo?"- "No , gracias"
"¿El viento?" - "El agua"
"¿El tiempo?" - "La Nada"
"¿Qué ha pasado?"
"Nada, espero..."
"¿Nada?"

Ya no importa (12 años despues)

No importa... 
que me digas que me quieres, 
no importa porque yo 
he dejado de amarte, 
al menos como siempre. 

Ya no importan ojos profundos, 
ya no importa tu pelo negro, 
ya no me importan tus consejos, 
tus palabras, tu amor callado 
ya no importa. 

 Ya no importan 
tus caricias y tus mimos. 

Sí me importa 
que no te importe. 

Si algún día me importase 
tu pelo, tus ojos, 
tu voz, tus palabras, tus caricias... 
olvídate de mi 
pues no importa 
que me quieras o no me quieras, 
ya no me importa....

24 de la Muerte (14 años despues es el 24 de la vida)

Me perdí entre este bolígrafo
y el blanco papel. 
No recuerdo que te puse 
porque aun no recuerdo todo lo que sentí

Sólo sé que la amo, 
por tu pelo rubio, por tus ojos verdes. 
Que aun no te puedo olvidar 
al menos no para siempre. 

Tengo miedo a morir 
y en cambio veo la muerte de cerca 
y me parece buena y amable, 
al menos mucho más que vivir nunca sin ti, Amor. 

Estoy por romper sus recuerdos,
los momentos, las cartas, 
deshacerme de los besos. 
Pero si lo hiciera despezaría mi corazón. 

Tu me dijiste un vez: 
"Ama, perdona y olvida, 
hoy te lo dice una amiga, 
mañana te lo dirá la vida".

El rincon secreto

Todos tenemos en nuestro corazón ese rincón secreto donde guardamos cada felicidad que vamos acumulando. Diversos rincones con diversas personas, diversos momentos, diversos grupos de gentes.

Rincones donde acumulamos las vivencias y que rara vez visitamos para desempolvarlos y volver a reír con aquella historia, o volver a ver los ojos de aquella persona, o recordar el primer beso de amor que nos dieron. Rara vez lo hacemos y realmente son nuestros tesoros:

"En un lejano país había un hombre que se dedicaba a acumular tesoros en los rincones de su sótano. Amulaba todo aquello que le gustaba, que le hacia feliz, que le causaba risa, emoción, escalofríos. Cada objeto, cada palabra, cada sonido y cada imagen la acumulaba en su propio rincón por orden de personas, sentimientos, lugares y momentos en el tiempo.

Las acumulaba pero no las visitaba, las dejaba allí cogiendo polvo mientras en su vivienda el hombre seguía buscando momentos acumulables y objetos de valor, recuerdos. Y cuando no los hallaba se encontraba en una gran tristeza.

Un día, hacia el final de su vida, decidió bajar al sótano, apenado por no haber vivido una vida plena, y halló que su sótano se encontraba abarrotado de todos los objetos que había acumulado durante años. Nadie sabia lo que guardaba porque a nadie se lo había contado.

Se sentó en el ultimo escalón, y sacudiendo el polvo empezó a desempolvar objetos, sentimientos, momentos que ya había olvidado. Y volvió a reír, a llorar, a amar, a vivir su propia vida. Y vio que no sólo la había vivido plenamente, sino que había sido feliz la mayoría del tiempo, pero nunca se acordó de bajar al sótano, desempolvar y darse cuenta de todo lo que llenaba su existencia.

El hombre murió, allí mismo, feliz, con una foto en la mano de la que había sido su mujer largos años, y rodeados de todos esos objetos, momentos y sentimientos que había ido guardando en su rincón secreto."

Así es nuestro corazón, un acumulador de momentos, sentimientos y vivencias, con diversos rincones secretos, y de vez en cuando deberíamos visitarlos, desempolvar y darmos cuenta que estamos viviendo la vida, que somos felices, que lo hemos sido, haciendo hueco para nuevas vivencias. No nos marchitemos pensando que somos infelices, nuestro corazón está lleno de cosas increibles que podemos volver a revivir

El pináculo (14 años despues)

Y ahora... ¿Qué has de hacer? 
Ya conoces lo que soy y conoces lo que siento. 
¿Qué has de hacer? 
Si sabes que del compromiso vivo. 
¿Qué he de hacer? 
Porque te sigo queriendo tanto. 
¿Qué he de hacer? 
Que ya no sé si soy Santo o Diablo del Infierno 
porque te sigo amando. 

 Y ya cayo tu torre, 
pero se alza de nuevo este pináculo 
donde antes estabas tu, 
un pináculo de nuevas ilusiones.

Dices que no me ves

Dices que nunca estoy,
que no aparezco en tu vida,
que mis ojos te son extraños
que ves de vez en cuando
y que no son medicina.

Dices que no me ves
y que he desaparecido de tu vida,
que ya no sientes escalofríos,
que ya ni las mariposas
pasan por tu estomago de visita.

Dices que no me ves,
¿Y porque tanta necesidad?
¿Por qué tu mente no imagina?
¿Por qué no cierras los ojos
y miras el alma?

Dices que tu no me ves
y yo te veo cada noche
en los sueños que despierto tengo,
te toco cada mañana
y realmente lo siento.

Veo tus ojos, tu sonrisa, tu pelo,
noto tu olor y tu aroma, y tu perfume,
saboreo tus labios y tu piel,
oigo tu risa, tu voz, tu silencio,
toco tus manos, tu nuca.

Tu dices que ya no me ves
y yo así contigo sueño.

¿Por qué escribo?

Escribo para que tú me leas,

para que conozcas mis más profundos pensamientos,

 para que me descubras,

para que me redescubras,

para ocultar en bonitas palabras lo oscuro del corazón.

 

Escribo para descargar esa rabia que el verte me provoca,

para resaltar el amor que te siento,

para exorcizar los fantasmas que se acurrucan bajo mi manta

 y me desvelan en los sueños.

 

Escribo para no necesitarte,

para buscar en otros ojos "la mirada",

para desahogar las penas que el alcohol no quita,

para perder el Norte y encontrar mi rumbo.

 

Escribo para enamorarte, si, a ti y a muchas más,

escribo para recordarte y para olvidarte,

para dejar de lado tus besos.

 

Escribo porque lo necesito,

porque escribiendo voy pasando las páginas de esta vida,

porque si escribo te alejo,

porque si estas no escribo.

 

Y ahora que cambio de libro,

ahora que se me presentan de nuevas las páginas en blanco

inicio una nueva historia.

 

Dejo escrito mis pensamientos....

por eso es por lo que escribo.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

¿Qué buscas?

Que buscas

sino el consuelo de unos brazos,

una mirada profunda,

la protección de un alma que te envuelve.

 

Que buscas

sino un instante de sinceridad,

una charla insustancial,

unas risas en un rincón.

 

Que buscas

sino un instante de paz,

una mano que te lleva,

un consuelo.

 

Que buscas

 

sino unas sabanas limpias,

un beso en la oscuridad,

un caricia en la espalda.

 

Que buscas

sino una escapada al paraíso,

 un aguacero que te empape,

un milenio en un segundo.

 

Que buscas

sino el humo del amor que se consume,

un amigo que te comprenda,

un lugar en este mundo.

 

Porque yo busco eso y más,

un amigo, un confidente,

un abrazo, un te quiero,

una lágrima, un hombro,

un silencio, una mirada,

una escapada, una lluvia,

un amor, un sentimiento,

una noche y tu cama,

un café, un paseo,

un te amo que al fin sea sincero.