jueves, 27 de agosto de 2009

Acabo de soñar

Acabo de soñar que te hacia el amor... 
tu cara, tu gestos, tus gemidos, 
acabo de soñar lo mismo que antaño hacíamos
pero tal como vino...desapareció

Un consejo.....................

Aceptarme un consejo, amigos.....

Nunca olvidéis porqué os enamorasteis...ahí esta la clave del éxito.

martes, 18 de agosto de 2009

Contigo aprendí

Contigo aprendí a quedar con carita de tonto,

a tragarme las lágrimas saladas,

a ver los suspiros en tus ojos.

 

Contigo aprendí lo que significa un beso,

a mirar mientras duermes

y a soñar mil veces despierto.

 

Contigo aprendí a llorar frente a un autobús, 

a reír solo en un andén

y a tener mariposas en un aeropuerto.

 

Contigo aprendí a respirar con otro pulmón,

a acabar las frases que no salen,

a agradecer el silencio de tus labios.

 

Contigo aprendí el placer de un sofá,

apreciar los muelles de la cama,

la oscuridad iluminada con una vela.

 

Contigo aprendí el orgasmo,

el placer de la siesta,

el gusto de unos labios.

 

Contigo aprendí que no debo estar solo,

que se cae el mundo si no estás,

que se pierde el color en tu distancia.

 

Contigo aprendí lo que era el mar,

los besos de sal,

el fin de una época.

 

Contigo aprendí y no enseñé nada,

contigo aprendí a no ser yo,

contigo aprendí a desvivirme,

a nacer de nuevo.

 

Contigo aprendí que de nada valen los sueños

si no los pudiera compartir a tu lado.

No es lo mismo...sin ti

No sabe igual el café por las mañanas

si no estás a la misma mesa,

no me despierta la misma luz

si tus ojos no me miran,

no es igual la ducha

sin el olor de tu colonia impregnando todo el baño.

 

No es lo mismo la comida

si no la preparo para ti,

no es lo mismo la sobremesa,

ni la siesta en el sofá,

no es lo mismo el paseo vespertino,

ni la caña del último bar.

 

No es lo mismo la serie de la televisión 

si no estás para comentarla,

no es lo mismo el almohadón 

si no lo compartes conmigo,

no es lo mismo acurrucarse solo en una esquina

que contra tu pecho.

 

 No es lo mismo las sabanas solitarias

que cuando tu las llenabas,

no es la misma la luz de la lámpara

con las velas apagadas,

no es el mismo silencio que impregnábamos con besos,

no es el mismo rumor de tu respiración,

cuando me despertaba de madrugada.

 

Ya nada es lo mismo que hace un año,

me ha costado,

pero he aprendido a vivir sin esas pequeñas cosas.