sábado, 30 de mayo de 2009

De estas noches solitarias

De estas noches solitarias 
yo me borro con cobardía, 
de esta noche solitaria 
yo reniego sin medidas. 

Y lavándome las manos 
en tus lágrimas saladas, 
yo me quito la coraza 
para sentirte palpitar. 

Como un fuego de haya, 
yo quemo mis noches solitarias, 
en una hoguera sin cenizas 
que me ha enfriado el alma. 

Y acabar al fin de todo 
con las noches solitarias 
como es hoy, 
como será mañana. 

Implicándome en tus sueños 
de perfecta dulzura enamorada, 
deshaciéndome en manojos de jazmines 
de blanco plata. 

Cierro el sueño, 
el libro de esperanzas, 
es oscuro el rincón 
donde me azota tu mirada,
estrellas sin fulgor 
de estas noches solitarias.